“Y he aquí, tu parienta Elisabet en su vejez también ha concebido un hijo; y este es el sexto mes para ella, la que llamaban estéril. Porque ninguna cosa será imposible para Dios. Entonces María dijo: He aquí la sierva del Señor; hágase conmigo conforme a tu palabra. Y el ángel se fue de su presencia” (Lc.1:36-38) LBLA
Cuando Dios habla o cuando Dios dijo que iba o va a hacer una cosa, entonces podemos estar seguros que tarde o temprano Él sí la cumple. No se trata de que nuestros deseos e ideas se cumplen si solo le creemos a Dios – eso es tratar de usar a Dios como nuestro siervo o nuestra marioneta.
ZACARÍAS vio su circunstancia y la de su esposa y decía: imposible. Y humanamente hablando es y era imposible. PERO Dios había hablado. Eso hace la diferencia.
PEDRO y los discípulos habían pescado toda la noche y no tuvieron éxito en su labor, Sin embargo, cuando Jesús habló y cuando sus discípulos le creyeron, y le obedecieron, experimentaron lo que no habían visto hasta el momento en toda su vida profesional (Lc.5:4-11).
MARÍA la madre de Jesús lo había entendido muy bien y por eso le dice a sus discípulos: ‘Haced lo que Él os dia´, y el agua se tornó en vino. Lo que Él diga es lo que vale – no lo que digan nuestros sentimientos, ideas, deseos.
Padre celestial, ORO y PIDO que yo tenga siempre un oído que escucha atentamente lo que me quieres decir; y que tenga un corazón de creyente, aunque lo que dices que vas a hacer es humanamente hablando imposible; y que tenga una disposición a obedecer tus mandamientos – para ver TÚ gloria en y a través de mi vida (Jn.15:14 / Lc.6:46-49 / Hebr.11:8 – Rom.4:20-21 / 2Sam.7:25-29 / Sal.115:3 / Is.46:10).
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